Verdadera democracia

sábado, 8 de noviembre de 2008


Un comentarista del post anterior asegura que en España no hay democracia y me hace una serie de preguntas que quiere que le conteste. Accedo con gusto para evitar que sus razonamientos esencialmente falaces le hagan caer en afirmaciones populistas y en el descreimiento hacia la democracia real.

¿Te parece democrático que los políticos metan sus narices en el poder judicial y pongan y quiten a los jueces encargados de juzgarlos?

En Estados Unidos los jueces del Tribunal Supremo son nombrados por el Presidente. Nuestro sistema es mejor que el americano. Ello no significa que nuestro sistema sea perfecto o libre de injerencias políticas. Podríamos tener el mejor sistema del mundo, y aún así el poder político se las arreglaría para tratar de meter las narices en el Poder Judicial. Ello no significa que no podamos mejorar nuestro sistema, sino que debemos ser conscientes de que la absoluta neutralidad e independencia judicial son materialmente imposibles. Por lo demás, nuestros jueces son inamovibles, por lo que no es posible "ponerlos y quitarlos" a gusto del Ministerio, tal y como asegura el comentarista. Cualquier práctica corrupta en este sentido, no puede ser más que marginal.

¿Te parece democrático que existan regiones fiscalmente muy privilegiadas?

Lo que no me parece es justo. Justicia y democracia son asuntos distintos. Algo similar sucede en Reino Unido, donde los ingleses se ven perjudicados por no tener un parlamento propio, mientras que los escoceses, galeses y norirlandeses sí los tienen, con sus correspondientes beneficios políticos.

¿Te parece democrático que los ciudadanos no tengan los mismos derechos y deberes en todo el territorio nacional?

Lo cierto es que la situación en EEUU y el Alemania es peor, puesto que cada Estado federado tiene su propio Código Penal. En España las diferencias son esencialmente administrativas y, en algunos casos, civiles. Sinceramente, mi preocupación por el desarrollo autonómico se centra en la Sanidad y la Educación, y no en la distribución de materias administrativas o civiles per se. Si su argumentación es que la autonomía es incompatible con la democracia, está muy equivocado.

¿Te parece democrática una ley electoral que no es proporcional y que hace que los votos de todos los españoles no valgan lo mismo?

Lo cierto es que nuestra ley electoral es mejor que, por ejemplo, la americana. En Estados Unidos existe el criterio mayoritario y algunos Estados pequeños están sobrerrepresentados en cuanto a votos electorales, por no decir la situación del Senado, donde N.Dakota y Nueva York tienen el mismo número de asientos a pesar de la diferencia poblacional.

¿Te parece democrático que no se puedan ejercer derechos fundamentales en muchas partes de España?

Si se ciñe a la situación vasca, no puedo más que darle la razón. Si me habla de "muchas partes", sólo puedo decir que está faltando a la verdad, y encima por interés, lo cual es de dudosa calidad moral.

¿Te parece democrático que se viole sistemáticamente la constitución sin que pase nada?

Esa es una afirmación gratuita. En todos los sistemas constitucionales del mundo existen violaciones del ordenamiento (si no, no harían falta Tribunales Constitucionales o Supremos). Y lo cierto es que no existe en nuestro ordenamiento una corrupción jurisdiccional especialmente mayor a la que hay en otras naciones, así que desconozco de dónde extrae el elemento "sistemático" de las posibles violaciones que se puedan cometer.

¿Te parece democrático que los partidos tomen las decisiones al margen del parlamento, y que los diputados voten siguiendo órdenes de los partidos?

Que los diputados se atengan a las decisiones del partido es, precisamente, lo más democrático. Ello se debe a que nuestro sistema es de voto a una lista cerrada y bloqueada, con lo cual, lo más legítimo para el ciudadano es que los miembros de esa lista cumplan con la labor que le es encomendada, esto es, representar al partido al que pertenecen. Por otra, parte, las listas abiertas y desbloqueadas perfeccionarían la democracia y permitirían el voto disidente, pero dificultarían sobremanera el voto, con lo que muchos ciudadanos tendrían mayores complicaciones al votar. O lo que es lo mismo: ¿es más democrático un sistema de voto complejo, que permite una mayor concreción al expresar el voto, o uno más sencillo, que permite a más ciudadanos votar correctamente?

Critica la "partitocracia", como si la existencia de partidos políticos fuera mala. El problema no es la partitocracia en sí, sino la forma en que los partidos toman las decisiones y las hacen efectivas. La existencia de partidos políticos es buena, y sirven para canalizar la participación política de los ciudadanos en el Estado. Lo malo no es que los partidos negocien y se relacionen entre sí, sino que en la toma de decisiones de éstos no participe la base. O lo que es lo mismo, los partidos son un medio fantástico para estimular la participación de la ciudadanía; para ello hace falta democratizar su funcionamiento, quizá (por qué no) estableciendo una Ley de Partidos que avance en la exigencia del funcionamiento democrático.

Pero más allá de eso, centra su crítica en aspectos concretos y mejorables de nuestro sistema, sin entrar a compararlo con los de nuestras naciones vecinas ni proponer sistemas alternativos que perfeccionasen el funcionamiento democrático. La naturaleza imperfecta del ser humano hace que todas sus creaciones también lo sean, incluyéndose en esto la democracia. Decía Fernando Savater hace unas semanas (y con esto en concreto estoy de acuerdo con él) que toda democracia real tiene su cuota de políticos chorizos y de jueces corruptos, porque es imposible crear un sistema perfectamente blindado contra tales eventualidades. La democracia práctica es, como todo, esencialmente imperfecta. Nuestra obligación como ciudadanos es la de procurar fomentar un sistema mejor, pero las imperfecciones concretas no anulan la existencia de una democracia, tanto formal como material.

Debemos estar prevenidos de aquellos que aseguran que nuestro país no es una verdadera democracia; esta gente sólo trata de deslegitimar el sistema existente con intenciones bastante cuestionables: unos sólo quieren hacerse los rebeldes y molar más; otros quieren hacerse notar; y otros simplemente desprecian la democracia como sistema de gobierno y pretenden extender el descreimiento entre los ciudadanos para beneficiar a sus intereses políticos.

PD: El comentarista en cuestión acabó su comentario diciendo (no sé si en coña o en serio):

Para terminar te diré que no busques mucho, es muy fácil encontrar verdaderas democracias: empieza por EE. UU. y continúa por Reino Unido. Imperfectas, desde luego, pero democracias, sin duda.
Espero que lo expuesto en este post le sirva.

33 opinones:

Anónimo dijo...

¿sabrá tu comentarista que el Reino Unido es el único país occidental donde las escuchas telefónicas no requieren orden judicial?

Anónimo dijo...

Otro dato sobre los EEUU, y lo poco que mezclan la política y la judicatura. El celebérrimo Earl Warren era gobernador de California cuando fue nombrado Presidente del Supremo. En España sería impensable que se nominase al presidente de una autonomía como presidente del TC.

Nairu dijo...

La partitocracia sí es mala en sí misma. Aquí el Legislativo y el Judicial están subordinados al aparato de los partidos. En EE.UU. los legisladores responden ante sus votantes, no ante el Pepiño o Acebes que hace las listas. Aquí todo el mundo sabe que si no hace lo que le diga el Pepiño no tiene futuro político. Es un sistema verdaderamente perverso y con consecuencias muy negativas.

En EE.UU. los jueces del Supremo no dependen de su servilismo a los clanes políticos para ser reelegidos porque su cargo es vitalicio.

La española es una democracia de bajísima calidad, una partitocracia abyecta.

García dijo...

Nairu, los magistrados del TC no son reelegibles tras su periodo de 9 años, y los del Supremo no abandonan el cargo.

En EEUU, el sistema electoral es mayoritario y uninominal, lo cual aumenta la responsabilidad de los diputados ante el electorado, pero disminuye la representatividad de las distintas corrientes políticas.

No sé porqué afirmas que los jueces están subyugados a los partidos, aunque asumo que es porque desconoces el funcionamiento del Poder Judicial más allá del CGPJ.

Y no, la partitocracia no está mal en sí misma. Está mal si los partidos no toman las decisiones de forma democrática, para lo cual propongo avanzar en la organización democrática de los partidos con una nueva Ley. Estados Unidos, con sus grandezas y sus virtudes, tiene el problema de tener un sistema político poco participativo para el ciudadano, puesto que la estructura del partido aparece para las elecciones y poco más. En España, con sus defectos, los militantes pueden participar activamente en las reuniones de sus partidos.

Nairu dijo...

Y no, la partitocracia no está mal en sí misma. Está mal si los partidos no toman las decisiones de forma democrática

Que los partidos tomen las decisiones de forma más democrática no va a eliminar el servilismo de los legisladores respecto a los partidos. Lo democrático es que éstos respondan ante los electores no ante el partido. La tiranía de los aparatos políticos convierte en una farsa la representación política.

Nairu dijo...

Y a la presidenta del Constitucional le han alargado el mandato porque interesaba políticamnete.

García dijo...

Nairu,

Que los partidos tomen decisiones de forma democrática hace que, precisamente, los partidos sean responsables ante la ciudadanía. En las elecciones los ciudadanos no votan, en general, a los candidatos concretos (principalmente porque no los conocen), sino que votan a la corriente ideológica que patrocina el partido. Esto se ve claramente en el Senado, donde sí hay listas abiertas y casi todos los votantes marcan en bloque a los candidatos del mismo partido.

Eso, básicamente, destruye tu concepción romántica del político individual respondiendo ante los electores. Normalmente los votantes no se preocupan por conocer al candidato, ni siquiera en Estados Unidos, donde la mayor parte del voto es ideológico, y sólo hay un 10% o un 15% de votantes veleta.

Además, ello implicaría sacrificar el sistema proporcional por uno mayoritario uninominal, al estilo americano o británico, eliminando la representatividad del voto. Eso supondría convertir el parlamento en un sistema de representación territorial (cada circunscripción representada por un diputado) en vez de ideológico (donde los diputados representen las distintas corrientes de opinión de la sociedad). Está bien para el senado, pero no para una cámara de representación eminentemente política.

PD: El juez asociado Samuel Alito fue nombrado por Bush porque le convenía políticamente un conservador religioso en el Supremo. El caso de la Pta. del Constitucional fue politizado por la oposición más que por el propio gobierno, ya que el alargamiento transitorio tiene justificación constitucional.

Citoyen dijo...

Lo de la "Democracia en América" tiene bastante de mito.

La primera serie de argumentos que yo esgrimiría tiene que ver con la tasa de abstención, las barreras a la participación- de origen económico- y las dramáticas desigualdades sociales. ¿Si la movilidad social es tan baja, por qué no tenemos políticas de redistribución de renta? Yo tengo varias respuestas:

a) Los Ricos votan más que los pobres.
b) Los ricos tienen mucho más poder de influencia que los pobres porque la política depende mucho más de la pasta.
c) Ninguna de las dos cosas anteriores son "casuales"

Pero eso es algo demasiado marxista para que convenza a gente como, digamos, tu interlocutor o Nairu.

Vamos con un caso más práctico: ¿como de bien funciona el sistema americano en otros sitios dónde se ha implantado? Os reto a encontrar una democracia sostenida que funcione bien que tenga un sistema presidencialista. No existe y dónde sí ha existido (américa latina) el sistema termina en golpes de Estado y otras cosas bonitas. Francia es el país más parecido y no me pongo a hablar del sistema francés porque me da la risa.

En definitiva En EUA la democracia no funciona, y funciona sólo en la medida en que tiene un sistema tremendamente barroco http://ego-marx.blogspot.com/2006/03/de-polticos-y-controles.html pero los costes de participación son enormes.

Todos los sistemas funcionales dependen de partidos políticos. http://ego-marx.blogspot.com/2007/12/elogio-de-la-disciplina-de-partido.html . Un partido político es opinión organizada; cuando las opiniones no se organizan en partidos, que normalmente suelen estar movidos por intereses generales (nadie votaría a un tipo que dijra "voy a beneficiar sólo a los míos") éstas a) O bien no se organizan b) Se organizan sobre base privada dónde no están movidas por nada que se parezca a la búsqueda del interés de todos.

Nairu dijo...

No sé de dónde sacas, Citoyen, que la movilidad social es tan baja. En el libro de Norberg En Defensa del Capitalismo Global, se dan datos que muestran una movilidad social muy alta en EE.UU.

Mario, yo no creo que los partidos puedan democratizarse mientras esto sea un oligopolio partitocrático, y además me parece muy indeseable que los legisladores deban su cargo sólo al partido por muy democrático que sea ese partido. Y no hace falta implantar un sistema uninominal mayoritario. Con que hubiese listas abiertas, ya sería un avance significativo. ¿No defiende eso UPyD? Si te parece tan modélica la democracia española, no entiendo que apoyes a un partido que aboga por la regeneración democrática.

En cuanto a la presidenta del Constitucional, que la prolongación de su mandato pueda tener sentido constitucionalmente, no implica que éste sea una maniobra política. Estábamos discutiendo si el poder Judicial es independiente, no si es constitucional una medida.

García dijo...

Nairu,

que yo defienda la regeneración de nuestro sistema democrático no significa que no haya otros sistemas (que algunos defendéis como más democráticos) que son esencialemente peores que el nuestro (o sea, que requieren más regeneración que el nuestro). De hecho, una parte de la izquierda americana se plantea la razonabilidad del Colegio Electoral.

Los legisladores no deben su cargo al partido, deben su cargo al ciudadano que les vota, y que lo hace para que represente a la corriente ideológica que defiende el partido en cuya lista va.

Por otra parte, UPyD plantea las listas abiertas, pero sinceramente , si crees que eso va a plantear alguna diferencia seria, creo que estás muy equivocado (lo que te he dicho: la gente vota en bloque a los candidatos de un mismo partido). Además, personalmente, la configuración de un sistema de circunscripción única o autonómica con listas abiertas, se me antoja muy compleja: por ejemplo en el Senado, las listas abiertas provocan que una diferencia de unos pocos votos se convierta en una mayoría de 3 a 1 (huelga decir que es bastante injusto).

Por otra parte, en cuanto a lo de la presidenta del Constitucional:
1- ¿Qué pretendes probar? ¿Que se puede alargar el mandato de los magistrados? La respuesta es no. El TC ha dicho que es lícito porque:

La finalidad última de la reforma es, pues, la de garantizar que la elección de la Presidencia se produzca tras la renovación parcial del Tribunal y, por lo tanto, con participación de los nuevos Magistrados. (...) Pretender, en efecto, que sea el Pleno renovado el que elija la Presidencia permite que este órgano continúe ejerciendo sus competencias con normalidad hasta que la renovación del Tribunal se produzca. Al mismo tiempo, refuerza la figura de la Presidencia tanto antes como después de la renovación, puesto que garantiza que el colegio de Magistrados sea presidido en todo momento por un miembro del Tribunal elegido con el concurso de todos sus integrantes.

La prórroga es, por tanto, una situación excepcional y limitada en el tiempo que tiene como objeto la preservación de la apariencia de funcionamiento normal del Tribunal. Lo mismo sucede, por ejemplo, con la prórroga del mandato de los magistrados del TC cuando se acaban los 9 años y el órgano encargado de proponer un nuevo candidato no ha logrado ponerse de acuerdo (Congreso, Senado o CGPJ), en cuyo caso continúa "en funciones" por motivos constitucionalmente justificables (evitar que el TC se quede momentáneamente sin magistrados).
2- El TC no está en el Poder Judicial.

Nairu dijo...

Es que no veo que defiendas ninguna regeneración.

Nairu dijo...

Los legisladores no deben su cargo al partido

Falso. Deben su cargo al aparato del partido. A los que hacen las listas. El que se salta la disciplina no vuelve a aparecer en las listas. Y eso lleva a una tiranía de los partidos. En un sistema por ejemplo uninominal ¿ Tú crees que todos los diputados del PSOE hubiesen votado a favor del Estatut? ¿Te parece positivo que voten que sí, contrariamente a lo opinión de sus electores ?

García dijo...

Deben su cargo al aparato del partido. A los que hacen las listas.

Bien Nairu. Bienvenido a mi teoría de la democratización del funcionamiento interno de los partidos.

Andrés Álvarez dijo...

"En Estados Unidos los jueces del Tribunal Supremo son nombrados por el Presidente. Nuestro sistema es mejor que el americano." - No creo que sea mejor y aún así son casos diferentes. Para empezar, el grado de politización de la Judicatura en América es bastante inferior, por no decir irrisorio, respecto a España, donde quizá, y me voy a aventurar a decirlo, tenemos el Tribunal más politizado del continente, el TC. Prueba de ello es que en gran parte de los mandatos presidenciales, el Tribunal Supremo, con sus más y sus menos, ha tenido sus roces con el Ejecutivo. Sonada es la lucha que mantuvieron el Tribunal Supremo y Delano Roosevelt acerca de la ampliación de los poderes presidenciales. En España, el TC ha sido en muchas ocasiones el eco confirmatorio de lo dispuesto por el Ejecutivo.

Siendo así las cosas, en América el presidente, bajo consejo y con el consentimiento del Senado, nombra a los nueve magistrados del Tribunal Supremo además de a otros magistrados y jueces federales. Los jueces de distrito son también nombrados por el presidente a través de las recomendaciones de los senadores del partido del presidente. Tanto los magistrados del Tribunal Supremo como los de los distintos órganos judiciales federales ostentan el ejercicio de su cargo con carácter vitalicio, pudiendo renunciar voluntariamente o ser destituidos mediante el citado proceso de impeachment, algo poco habitual.

Esto elimina el favoritismo a la hora de constituir a los Tribunales, reduce la injerencia del Ejecutivo a sus niveles mínimos y limita el pactismo entre las fuerzas políticas principales a la hora de elegir a los candidatos a componer un Tribunal. Todo esto en España es materialmente imposible. La Independencia de la Justicia es una de las grandes asignaturas pendientes del Régimen de la Tercera Restauración.


Dices que "los ingleses se ven perjudicados por no tener un parlamento propio", pero lo cierto es que un total de 529 escaños de la Cámara de los Comunes corresponden a las circunscripciones electorales inglesas, lo que demuestra el enorme peso político de Inglaterra (los escaños de los comunes son en total 646) en el conjunto de la Unión. En el fondo, la elevada población de Inglaterra en el conjunto nacional se traduce en una gran representación parlamentaria, por lo que los intereses particulares de Inglaterra están asegurados.

"Lo cierto es que la situación en EEUU y el Alemania es peor, puesto que cada Estado federado tiene su propio Código Penal." - En América, en materia de derechos fundamentales, salvo el caso de la pena de muerte, todos los ciudadanos tienen los mismos derechos en el proceso. Además, una de las facultades de la Federación es la legislación básica o de directrices, que en los últimos años ha venido a ganar importancia. Y en Alemania, con un federalismo cooperativo, la Federación reúne si cabe más poderes en materia de legislación penal.

"Lo cierto es que nuestra ley electoral es mejor que, por ejemplo, la americana. En Estados Unidos existe el criterio mayoritario y algunos Estados pequeños están sobrerrepresentados en cuanto a votos electorales, por no decir la situación del Senado, donde N.Dakota y Nueva York tienen el mismo número de asientos a pesar de la diferencia poblacional." - ¿Cómo va a ser mejor un sistema (el español) que admite un bipartidismo cerrado y una excesiva (que se traduce en una falta de Equidad) representación parlamentaria de ciertos partidos regionales (que tienen menos votos que la tercera fuerza política nacional), frente a un sistema (el americano) que establece un bipartidismo abierto y limita el peso de los partidos locales/regionales?

Por otro lado, el hecho de que Vermont o Utah tengan los mismos senadores (2 por estado) que California o Florida se debe a que mediante una representación proporcional en el Senado se garantizan los deseos pluralistas de la Nación y los intereses de las minorías.

"Y lo cierto es que no existe en nuestro ordenamiento una corrupción jurisdiccional especialmente mayor a la que hay en otras naciones" - No si la comparamos con la existente en Bolivia o Venezuela, pero algunas actuaciones del TC se quedan bastante lejos de los niveles aceptables y asumibles por una Democracia occidental.

"¿Te parece democrático que los partidos tomen las decisiones al margen del parlamento, y que los diputados voten siguiendo órdenes de los partidos?" - Lo primero se llama Democracia de partidos, necesaria en un sistema electivo y representativo, y lo segundo es la disciplina de partido, algo que sí que es poco deseable ya que fomenta los intereses de partido en detrimento de los intereses generales, por no añadir que es una traba al freedom of speech que debería ostentar todo representante.

Esas eran todas mis observaciones

García dijo...

Andrés,

Usas dos varas de medir distintas para juzgar el sistema americano u otros extranjeros y el español. Por ejemplo, dices que nuestro TC es el más politizado del continente, olvidando que el Consejo Constitucional francés está integrado, entre otros, por los ex Presidentes de la República francesa.

Ello también se ve cuando dices que el hecho de que los magistrados americanos sean nombrados por el Presidente a propuesta de los senadores de su partido es menos político que un nombramiento por parte de 3/5 partes del Congreso o del Senado.

Afirmas que el TC ha venido a ser el "eco confirmatorio del Ejecutivo". Es un razonamiento falaz: la clave no está en si confirma o no las decisiones del poder político, sino si tal confirmación está justificada o no. Es decir, si el poder político no infringe la Constitución, no hay porqué revocar la disposición recurrida. Por otra parte, los mayores poderes del Presidente americano (y la forma en que los ha ejercido históricamente) se presta a más rozamiento entre el ejecutivo y el judicial.

Afirmas que la compentencia penal en EEUU o Alemania no es tan pronunciada como podría aparentar. Lo cierto es que simplemente con que tengan tal competencia, ya exceden con mucho la que tienen nuestras CCAA en esa materia. Por lo demás, nuestra Constitución también reserva para el Estado central el desarrollo de los Derechos fundamentales y la regulación básica de su ejercicio.

Dices que el TC se queda lejos de las exigencias básicas de una Democracia occidental. Desconozco a qué se debe una afirmación tan grave y a la vez tan gratuita. Que el TC pueda haber cometido excesos y errores no puede servir para negar que, en general, ha funcionado de forma muy satisfactoria. Sinceramente, el Tribunal Supremo de Estados Unidos o el Tribunal Constitucional Federal de Alemania han cometido felonías comparables o superiores a las de nuestro TC.

Sobre la disciplina de partido, sólo me queda decir que me parece coherente con la forma en que son elegidos nuestros representantes. Además, no es una exigencia legal, sino meramente moral, así que no es una traba a la libertad de expresión de los representantes. Si quieres acabar con la disciplina de partido, hay que cambiar el sistema electoral. Aún así, en Francia, con un sistema electoral uninominal, la ruptura de la disciplina de partido es mucho más limitada de la que existe en EEUU o en Gran Bretaña. La diferencia esencial no es normativa, sino de concepción de la democracia: en las naciones anglosajonas hay una visión más individualista de la política, mientras en la Europa continental se sigue un visión más cooperativa y asociativa, con lo que la disidencia interna y la deslealtad para con la organización está peor vista.

En definitiva, creo que tu enjuiciamiento del sistema español es sesgado, porque usas dos criterios distintos para juzgar el funcionamiento de nuestro sistema. ¿Merece un repaso para mejorarse? Sí. Pero es una verdadera democracia.

Recuerdos perdidos dijo...

Gracias Altavoz por aclarar mis dudas.
Saludos a todos

Republica Rojigualda dijo...

Muchas gracias, Mario por dedicar una entrada a responderme. Porque previniendo a la gente de los monstruos malignos a los que no nos gusta la partitocracia solo ayudas a difundir nuestras ideas, lo cual es bastante de agradecer.

Aquí hay mucho que decir, pero el hecho de que se me hayan adelantado Nairu y Andrés, diciendo a grandes rasgos lo mismo que yo iba a contestar, indica que mis opiniones no son tan descabelladas como aseguras. Es más, si yo no dejase ningún comentario en esta entrada y esperase a que vinieran otros blogueros a comentar, estoy seguro de que estaría de acuerdo con la mayoría de ellos. El gigantesco déficit democrático que tiene la monarquía parlamentaria española es un clamor entre los círculos mejor informados.

Que Citoyen eche pestes de la democracia norteamericana no me extraña (creo que la mejor respuesta que se lo podría dar es lo dijo recuerdos perdidos en la última entrada: “A lo mejor resulta que donde hay democracia es en Corea del Norte, China o Cuba y yo todavía no me he enterado.”), pero que digas que la partitocracia española es mejor que la democracia americana me ha dejado de piedra. Eso sí que no me lo esperaba. A mí sinceramente se me ocurren muy pocas cosas que necesiten ser “regeneradas” en EE. UU., aparte del sistema electoral. Claro, si la “regeneración” va encaminada a convertir la centenaria democracia estadounidense en una partitocracia a la europea, con estructuras de partidos que controlan las instituciones del estado, entonces sí, en ese caso les queda mucho más camino que recorrer que a nosotros.

“Justicia y democracia son asuntos distintos.”
Son distintos, pero indisociables. No hay justicia sin democracia ni democracia sin justicia. Sirva como ilustración esta imagen. Como es bien sabido, el estado español “propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político”. Como dijo Montesquieu, una cosa no es justa por ser ley, debe ser ley porque es justa.

“Lo cierto es que la situación en EEUU y el Alemania es peor, puesto que cada Estado federado tiene su propio Código Penal.”
Si dejamos a un lado la situación penal y procesal y nos ceñimos a derechos fundamentales y al acceso a servicios públicos de los ciudadanos, la constitución americana, a diferencia de la española, no dice que todos los ciudadanos tengan que tener los mismos derechos a nivel nacional más que los reconocidos por la propia constitución. Su artículo 4, recoge el principio establecido ya en los Artículos de la Confederación, según el cual los ciudadanos tendrán los derechos reconocidos por el estado donde residan. Es evidente que eso se cumple, y también que en España no todos los españoles tenemos los mismos derechos. Pregúntale a Rosa Díez.

Si su argumentación es que la autonomía es incompatible con la democracia, está muy equivocado.

La autonomía no es incompatible con la democracia, al contrario. Pero el Estado de las Autonomías sí que es incompatible con la democracia y con la unidad de España. Yo soy partidario de un estado unitario, pero antes que seguir con este engendro político que es el estado de las autonomías, prefiero un estado federal simétrico y cerrado, en el que los servicios públicos que afecten a la igualdad de los ciudadanos estén en manos del gobierno central.

”En Estados Unidos existe el criterio mayoritario y algunos Estados pequeños están sobrerrepresentados en cuanto a votos electorales, por no decir la situación del Senado, donde N.Dakota y Nueva York tienen el mismo número de asientos a pesar de la diferencia poblacional.”
Sí, y en España el criterio proporcional está completamente desvirtuado en las provincias poco pobladas y solamente puede darse aceptablemente en las que tienen muchos escaños, como Madrid o Barcelona. Además, las provincias poco pobladas también están sobrerrepresentades, lo que quiere decir que un voto emitido en Soria o Teruel, por ejemplo, vale 3 veces más que uno emitido en Madrid. Deberías verte el vídeo que hizo UPD al respecto, denunciando esto mismo. En cuanto al reparto de senadores en EE. UU., estoy de acuerdo, ese es un principio de ciertos federalismos que tampoco comparto.

”Si se ciñe a la situación vasca, no puedo más que darle la razón. Si me habla de "muchas partes", sólo puedo decir que está faltando a la verdad, y encima por interés, lo cual es de dudosa calidad moral.”
Vascongadas, Cataluña, Baleares, Galicia… ¿te suenan?

”Y lo cierto es que no existe en nuestro ordenamiento una corrupción jurisdiccional especialmente mayor a la que hay en otras naciones, así que desconozco de dónde extrae el elemento "sistemático" de las posibles violaciones que se puedan cometer.”
Siguiendo el ejemplo de Andrés, seguro que en Ghana o en Burkina Faso la corrupción es mucho mayor. Pero aquí no hablamos de eso, hablamos de que en tanto que se vulneran derechos constitucionales, se viola la constitución. Solo con decir eso bastaría. Unas veces los poderes públicos pasan por alto esas violaciones, y otras veces son perpetradas por los propios poderes públicos.

”Que los diputados se atengan a las decisiones del partido es, precisamente, lo más democrático.”
A eso se le llama mandato imperativo, y está expresamente prohibido por el artículo 67.2 de la constitución.

”¿es más democrático un sistema de voto complejo, que permite una mayor concreción al expresar el voto, o uno más sencillo, que permite a más ciudadanos votar correctamente?”
Si lo que buscamos es sencillez, lo más sencillo de todo es que solo haya un partido y así nadie se equivoca con la papeleta, o mejor aún, más sencillo todavía: no votar. De esta forma nos quitamos de líos. Ir al colegio electoral, buscar la papeleta, meterla en el sobre, esperar cola e introducirla en la urna es un proceso muy complicado. Lo mejor es que no votemos y nos quedemos en casa viendo las deposiciones, perdón, quiero decir reposiciones de Gran Hermano.

Nunca podrás levantar una democracia digna de tal nombre si piensas que los votantes son deficientes mentales, carentes de la masa encefálica suficiente para marcar casillas o tachar y añadir nombres.

”Critica la "partitocracia", como si la existencia de partidos políticos fuera mala.”
Ese es un argumento falaz, que solo se puede perdonar por falta de conocimiento del término. Partitocracia no es la necesaria existencia de partidos dentro de una democracia, partitocracia (etimológicamente, gobierno de los partidos) es un neologismo que se contrapone a la noción de democracia (es decir, gobierno del pueblo) para representar aquellos regímenes donde existen elecciones periódicas, distintos partidos políticos y se reconocen libertades individuales, pero donde no hay separación de poderes. Donde los partidos son estructuras piramidales cerradas que se reparten ese poder absoluto. Se reparten el poder judicial, el tribunal constitucional, la televisión pública, las cajas de ahorro… siempre a favor del partido en el gobierno sea nacional, autonómico o municipal. Las partitocracias son frecuentes con sistemas parlamentarios, en los que un partido con mayoría de escaños controla no solo el gobierno, sino también el poder judicial y el tribunal constitucional que sirven para dar el visto bueno a todo lo que haga el gobierno siempre que su inconstitucionalidad no resulte extremadamente evidente. Eso es una partitocracia, también llamada estado de partidos u oligarquía de partidos, y es una perversión o degeneración de una democracia. Es una pseudodemocracia, donde sí son posibles los cambios de gobierno, pero el ejecutivo carece de contrapesos.

”Pero más allá de eso, centra su crítica en aspectos concretos y mejorables de nuestro sistema, sin entrar a compararlo con los de nuestras naciones vecinas ni proponer sistemas alternativos que perfeccionasen el funcionamiento democrático.”
No, no voy a caer en esa trampa. Lo que no voy a hacer, como pretendes que haga, es decir “lo que hay en España no es democracia, solo la implantación de la forma de estado y de gobierno, el modelo territorial y el sistema electoral que yo quiero convertirán a España en una democracia”. Eso sería muy poco democrático por mi parte, así que se lo dejo a otros.

Hay muchas formas de democracia y nadie tiene una barita mágica ni una solución universal. Yo tengo mis preferencias, pero esto no quiere decir que haya otras opciones que conviertan igualmente a España en una democracia. Y lo que yo pretendo no es imponer mi modelo, sino concienciar a la gente del gigantesco déficit democrático que tiene la monarquía parlamentaria española. Es necesario saber primero qué es lo que no funciona antes de plantearse cómo arreglarlo. Primero se diagnostica la enfermedad, y después se prescribe el tratamiento.

En cuanto a la comparación con los estados vecinos, tampoco caeré en esa otra trampa. Pondré un ejemplo fácilmente entendible. Cuando el tirano de Guinea Ecuatorial, Obiang Ngema, vino a España dijo que su país se merecía un sobresaliente en democracia y respeto a los derechos humanos en comparación con los países de su entorno geopolítico. Y lo más triste de todo es que el sangriento y corrupto déspota probablemente tenga razón. Pues eso, mal de muchos, consuelo de tontos.

”Estados Unidos, con sus grandezas y sus virtudes, tiene el problema de tener un sistema político poco participativo para el ciudadano, puesto que la estructura del partido aparece para las elecciones y poco más. En España, con sus defectos, los militantes pueden participar activamente en las reuniones de sus partidos.”
Sí, los militantes pueden ir a las reuniones y hablar si les dejan, pero da igual, porque luego el aparato del partido hace lo que le da la gana al margen de los militantes. Así funciona el estado de partidos español. En cuanto a que la estructura de los partidos en EE. UU. solo aparece para las elecciones, a mí eso me parece una de las grandes virtudes del sistema americano. En Norteamérica los partidos sirven para ganar elecciones, en España los partidos son estructuras de poder. Por eso allí en los partidos decide la base, y aquí lo que tenemos son cientos de paniagudos obedientes a la cúpula del partido, de la que depende su carrera política. Por otra parte, no sé de dónde te sacas que en EE. UU. los militantes no puedan asistir a las reuniones de partido o que éstas no existan.

”en Estados Unidos, donde la mayor parte del voto es ideológico, y sólo hay un 10% o un 15% de votantes veleta.”
Eso no es cierto. Los votantes estadounidenses son muy críticos con sus candidatos y el voto puede fluctuar bastante, más que nada por los bajos índices de participación.

”En las elecciones los ciudadanos no votan, en general, a los candidatos concretos (principalmente porque no los conocen), sino que votan a la corriente ideológica que patrocina el partido.”
El hecho de que poca gente (solo los mejor informados) en un principio vaya a utilizar esa posibilidad, no es razón suficiente para negársela a quienes sí quieran usarla. Los españoles están acostumbrados a votar listas cerradas y bloqueadas, a resignarse y a tragar con lo que el partido quiera. Sin embargo, el día que haya listas abiertas y se conciencie a los ciudadanos de lo que ello supone, el vínculo votante-partido empezará a ser sustituido, poco a poco, por el vínculo votante-candidatos.

En ocasiones la demanda social de listas abiertas resulta evidente. Tal es el caso de las últimas elecciones autonómicas en Baleares, donde varios centenares de personas tacharon en la papeleta el nombre de Maria de la Pau Janer (nazionalista catalana que iba como independiente en la lista del PP), con lo que sus votos resultaron nulos. Esos “votos protesta” fueron suficientes para dejar a Matas sin la mayoría absoluta y por tanto, sin la presidencia de las islas. Y créeme que si este sistema hubiese estado vigente el 9-M, no hubieran sido pocos los votantes del PP que habrían tachado el nombre de Beatriz Rodríguez Salmones, nº10 por Madrid y firme defensora del canon digital.

”Esto se ve claramente en el Senado, donde sí hay listas abiertas y casi todos los votantes marcan en bloque a los candidatos del mismo partido.”
Lo que pasa es que el sistema electoral mayoritario corregido del senado en el que cada provincia tiene 4 senadores, 3 de los cuales son siempre para el partido con más votos y el 4º es forzosamente para el segundo partido, hace que marcar la casilla del candidato de otro partido sea tirar el voto a la basura.

”Los legisladores no deben su cargo al partido, deben su cargo al ciudadano que les vota, y que lo hace para que represente a la corriente ideológica que defiende el partido en cuya lista va. (...) Que los partidos tomen decisiones de forma democrática hace que, precisamente, los partidos sean responsables ante la ciudadanía”
Si de lo que hablamos es que una vez elegidos el partido no les puede echar de su escaño, entonces sí. Pero a quien deben la silla es al partido que les ha puesto en una lista y del que depende su continuidad en los próximos comicios, como bien señala Nairu. Si por democrática entendemos que son los militantes y no solo los altos cargos quienes deciden, entonces podemos decir que los aparatos de los partidos son responsables ante su base, algo que es muy necesario, pero no suficiente. Los candidatos a diputados necesitan, además de la aprobación de la base, la aprobación de la ciudadanía, es decir, que haya listas abiertas.

”¿Qué pretendes probar? ¿Que se puede alargar el mandato de los magistrados? La respuesta es no. El TC ha dicho que es lícito”
¡Claro! ¿Qué va a decir el TC? El TC no va a decir “sí, hemos hecho esto, que es inconstitucional pero nos la trae floja”. Pero como dice Nairu, lo que se discute no es si son legales las maniobras del TC, sino si el TC es independiente.

”Siendo así las cosas, en América el presidente, bajo consejo y con el consentimiento del Senado, nombra a los nueve magistrados del Tribunal Supremo”
Eso está mal expresado. Hay que darle el matiz necesario para desmontar argumentaciones falaces como esta:
”Ello también se ve cuando dices que el hecho de que los magistrados americanos sean nombrados por el Presidente a propuesta de los senadores de su partido es menos político que un nombramiento por parte de 3/5 partes del Congreso o del Senado.”
En primer lugar, el presidente americano no nombra a los 9 miembros. Nombra siempre que haya una vacante por las razones antes citadas por Andrés. Puede darse la situación de que un presidente nombre a los 9 (algo casi imposible y que sería penado por la ciudadanía), o también de que no nombre a ninguno, como le pasó a Carter. Además, al ser independiente la elección de las cámaras de la del presidente, el partido que gobierna puede no contar con mayoría parlamentaria, y aun teniéndola, el hecho de que exista una minoría de bloqueo fijada en 41 senadores hace que el presidente no pueda proponer a candidatos muy politizados o radicales. Es más, incluso si tiene mayoría el partido del presidente, la libertad de voto de los senadores puede obligar al comandante en jefe a cambiar su propuesta. Es lo que le pasó al juez Harriet Miers, que iba a ser propuesto por Bush, pero éste se vio obligado a cambiarlo después de que los propios senadores republicanos manifestaran su disconformidad con el candidato. Comparémoslo con el sistema español, que es el reparto de la tarta judicial y de la tarta del TC que hacen los partidos en España: la mitad de jueces los eliges tú, la otra mitad yo y todos contentos. Vamos, igualito.

”los mayores poderes del Presidente americano (y la forma en que los ha ejercido históricamente) se presta a más rozamiento entre el ejecutivo y el judicial.”
¡Pero hombre! Si eso es lo bonito, lo democrático. Que haya roces es señal de que los poderes se controlan los unos a los otros, de que hay contrapesos.

“en las naciones anglosajonas hay una visión más individualista de la política, mientras en la Europa continental se sigue un visión más cooperativa y asociativa”
Eso es una forma un tanto eufemística de expresar la triste realidad. En los países anglosajones la democracia suele ser verdadera y con siglos de historia, mientras que en la Europa continental lo que abundan son las partitocracias surgidas después de la II Guerra Mundial. Pero ya es hora de superar esa etapa y no hay razón para seguir negándonos una democracia a la americana, la tengan o no nuestros vecinos.

García dijo...

. Comparémoslo con el sistema español, que es el reparto de la tarta judicial y de la tarta del TC que hacen los partidos en España: la mitad de jueces los eliges tú, la otra mitad yo y todos contentos.

Vaya, lo que yo había dicho: que empleas dos varas de medir muy distintas para un sistema y el otro.

Por ejemplo, dices que el Presidente no nombra a os 9 miembros. Sí, sí los nombra. Lo que pasa es que no lo hace a la vez. Pero resultacurioso que me niegues la politización cuando basta ver quién ha nombrado a cada magistrado para saber si éste es conservador o progresista.

Cierto, discutimos si el TC es independiente. Lo que no sé es qué criterios seguís para decir que no. De todas formas, confundes independencia y politización, que son cosas muy distintas. La primera tiene que ver con la capacidad de toma decisiones autónomas y la segunda tiene que ver con la imparcialidad del Tribunal. Lo segundo no existe en la realidad. Es imposible. Nadie puede llegar a un juicio sin preconcepciones. Podemos tratar de asegurarnos de que dichos prejuicios tengan la mínima mínima influencia en el proceso, pero lo cierto es que la Historia judicial americana está plagada de politización e influencia judicial (en el año 2000 el TS americano paró el recuento de votos en Florida bajo el argumento de que seguir haciéndolo mermaría la legitimidad democrática del nuevo electo,¿nadie lo recuerda?).

En fin, vaya. Que la diferencia entre ellos y nosotros no es tal como para asegurar que sus jueces sí son independientes y los nuestros no.

Además, me sorprende que la mayor parte de estas críticas vengan de gente sin el menor estudio jurídico (excepto Andrés, que me consta que estudia derecho y que afirma, como yo, que en España sí existe democracia, a pesar de su desacuerdo con su configuración).

Republica Rojigualda dijo...

“¿sabrá tu comentarista que el Reino Unido es el único país occidental donde las escuchas telefónicas no requieren orden judicial?”
Pues mira, no lo sabía, y te agradezco la información. Me informaré sobre este tema. En un país sembrado de cámaras de videovigilancia con programas de reconocimiento facial, algo que permite trazar todos los movimientos de un ciudadano a lo largo del día, no me extraña nada lo de las escuchas. Eso casa perfectamente con la teoría bastante extendida de que la democracia más antigua del mundo, se está convirtiendo en el estado totalitario y ubicuo que dibujó Orwell en 1984.


”La Independencia de la Justicia es una de las grandes asignaturas pendientes del Régimen de la Tercera Restauración.”
Bueno, aunque esta sea la 3ª vez que se restaura a los borbones, el régimen caciquil de la Restauración no se llamo “Segunda Restauración”, así que el régimen de la Transición, se podría llamar “la segunda Restauración” o “Restauración 2.0”, por las muchas similitudes que guardan ambos regímenes.

”Lo primero se llama Democracia de partidos, necesaria en un sistema electivo y representativo”
Cuando digo que toman decisiones al margen del parlamento no me refiero a la democracia interna de los partidos, me refiero a que los cabezas de listas de los partidos se reúnen y pactan al margen de los diputados. Éstos solo se limitan a votar siguiendo órdenes de aquéllos el día de la votación. Esto es una nefasta herencia de la Transición, donde no hubo un proceso constituyente limpio y transparente sino que se hizo una constitución con apaños por debajo de la mesa y en la que las cortes ordinarias (no constituyentes) elegidas en 1977 se limitaron a aceptar lo que ya estaba hecho y pactado de antemano por los cabecillas políticos; con la honrosa excepción de la mitad de los diputados de AP. Este es uno de los vicios que arrastra el régimen juancarlista desde antes de su institución, y que corrompe sus raíces. El parlamento está para que los diputados discutan encarnizadamente, y esas discusiones vayan modelando las leyes. El parlamento no está para que 350 señores le den a un botón siguiendo “órdenes de arriba”, porque para eso no necesitamos parlamento, basta con que haya un señor por cada partido y que se aplique el voto ponderado. Así por lo menos nos ahorramos muchos sueldos y la estafa resulta menos insultante.

Republica Rojigualda dijo...

No utilizo dos varas de medir, lo que pasa es que la vara de medir parece de distinto tamaño en relación al objeto medido (en este caso la calidad democrática). Es solo un efecto óptico.

El presidente no nombra a los 9 miembros. Desde luego un mismo presidente no. Nunca se ha dado el caso. Lo normal es que nombre 2 o 3, pero también puede darse el caso de que no nombre ninguno, como le pasó a Carter. Me vas a decir que nombrarlos de una tacada repartiéndoselos (uno tú, uno yo) como denunció Rosa Díez es más democrático que un nombramiento vitalicio que provoca vacantes azarosas. Y que además no pueden los presidentes proponer a quienes quieran, porque pueden tirarles abajo el nombramiento. En cuanto a que basta saber quien ha nombrado a un juez para saber su ideología, eso es así en España (con contadísimas excepciones) pero no en EE. UU., donde una de las razones que se utiliza siempre para defender la eficiencia de ese sistema es precisamente la cantidad de jueces nombrados por un presidente conservador que han adoptado posiciones liberales y viceversa. Sobran los ejemplos. Por ejemplo, te gustará saber que quien legalizó el aborto fue Harry Blackmun, un juez propuesto por Nixon. Y que John Paul Stevens, uno de los más veteranos jueces de la Corte Suprema, que fue nombrado por Gerald Ford, es considerado uno de los jueces más liberales del tribunal, favorable a los matrimonios homosexuales y al aborto.

”De todas formas, confundes independencia y politización, que son cosas muy distintas. La primera tiene que ver con la capacidad de toma decisiones autónomas y la segunda tiene que ver con la imparcialidad del Tribunal. Lo segundo no existe en la realidad. Es imposible. Nadie puede llegar a un juicio sin preconcepciones.”
Politización es que el poder político mangonee al poder judicial, que es lo que anula su independencia. Si hay politización no puede haber independencia. Que los jueces tengan opiniones es algo que entra dentro de la normalidad democrática y a ningún juez se le podría recusar o retirar por tener opiniones y manifestarlas. Lo que no entra dentro de la normalidad democrática es que el CGPJ sea un apéndice del legislativo, que es lo que en realidad es.

”Además, me sorprende que la mayor parte de estas críticas vengan de gente sin el menor estudio jurídico (excepto Andrés, que me consta que estudia derecho y que afirma, como yo, que en España sí existe democracia, a pesar de su desacuerdo con su configuración).”
A eso se le llama falacia ad hominem abusiva (es decir, cuando no valora el argumento en sí, sino que se intenta desestimar menospreciando al oponente) es porque carece de argumentos. Además, esta falacia ad hominem abusiva, es totalmente gratuita y sin fundamento, porque además se basa en tu desconocimiento de mi persona. Porque ¿tú qué sabes qué estudios tengo o dejo de tener?

Por otra parte, aunque yo o cualquiera que te contradijera, careciera siquiera de graduado escolar y tú fueras un catedrático de derecho constitucional, sería un insulto y un menosprecio de tu valía profesional que recurrieras a tu título para demostrar que estás en posesión de la verdad. Tener un título no da la razón en ningún debate. Eso forma parte del ABC de todo demócrata que merezca ser considerado como tal.

Nairu dijo...

Me parecen magníficas las intervenciones de República Rojigualda y de Andrés.

Anónimo dijo...

Algunas cositas al último comentario de "República":

1)Las elecciones del TS de EEUU son meramente políticas. Luego cada juez sale por su lado, pero se intenta condicionar al TS. ¿Por qué cada juez luego hace lo que quiere? Porque son independientes a pesar de su elección política.

2) Me uno a la apreciación de Mario de que hay mucho hablador sin conocimientos. Decir que el TC normalmente no ha parado al gobierno o al legislativo, es desconocer las miles de sentencias que otorgan amparo o declaran la inconstitucionalidad. Ignorancia pura y simple, porque la jurisprudencia del TC se conoce en los repertorios y no en los titulares de la prensa.

3) El sistema de partidos da coherencia y es barato. Si tuviésemos 350 diputados decidiendo lo que les dé la gana, entonces los presupuestos se dispararían, y no se podría hacer nada en ninguna parte del país, por necesario que fuese, sin compensar a los legisladores del resto del alguna forma. En el Congreso de EEUU la frase más oída es la versión norteamericana de "¿Qué hay de lo mío?".

4) La disciplina de partido no es servilismo. La gente vota un partido y espera que los elegidos se comportan como dice el partido al que han votado. Así de sencillo.

jota dijo...

Mario, se nota tu dedicación universitaria en tus posts...y se agradece. Contra la generalización y las imprecisiones verbales, el punto en la i.

Me gusta.

Abrazos,

Javi.

Nairu dijo...

La disciplina de partido no es servilismo. La gente vota un partido y espera que los elegidos se comportan como dice el partido al que han votado

Eso será lo que esperas tú. Yo aspiro a estar representado. A votar a un representante, apoder elegir entre un abanico de ellos. Ahora los únicos que están representados son el aparato político del PSOE, y el de los otros partidos. ¿ Tú crees que todos los votantes del PSOE se sintieron representados cuando todos los diputados del partido votaron, por ejemplo, el Estatut?
¿ No sería más democrático que unos hubiesen votado a favor y otros en contra y que luego los electores les hubiesen renovado la confianza en consecuencia?

karpin dijo...

Mi pregunta es, ¿UPyD realmente desea cambiar este sistema o desea ser más de lo mismo? Como es posible que en los propios estatutos de UPyD se le de al consejo de dirección la potestad de "Decidir el sentido del voto de los parlamentarios y representantes del partido en las instituciones de cualquier ámbito, y su posición política en votaciones consideradas estratégicas con relación al Programa del partido.", si UPyD dice que es un partido constitucionalista... ¿no se ha enterado que el tribunal constitucional se ha pronunciado encontra de estas directrices? UPyD cree que la constitución española da derecho a los partidos políticos a decidir el voto de los parlamentarios, para que desea listas abiertas si despues el voto lo quieren decidir como partido.

García dijo...

Veo, Karpin, que no sabe usted demasiado del tema. Lo que está prohibido es suplantar la voluntad del diputado al ejercer el voto. No está prohibido decidir qué postura parlamentaria desea mantaner un partido y transmitirle a sus diputados esta decisión, siendo éste el que, en última instancia, decida el sentido del voto.

Este es precisamente el problema de hablar no sabiendo leer.

zarevitz dijo...

Estoy de acuerdo con Rojigualda en que, quizá contra toda intuición, el sistema estadounidense incentiva mejor que el sistema español el llegar a un buen acuerdo. No repito lo que dije aquí y aquí.

García dijo...

Zarevitz, he visto una de tus intervenciones en esos hilos y te señalo (de buen rollo) que nuestro TC tiene un quorum de 8 magistrados.

Saludos!

zarevitz dijo...

Así es! Creo que lo comentamos después, cuando llegó la guerra de las recusaciones. Como verás, como adivino tampoco tengo precio. :-)

Andrés Álvarez dijo...

En respuesta a Mario;

Lo cierto es que la efectividad de una Constitución y de un sistema político se mide a través de varios índices:

1ºLa estabilidad
2ºLas garantías de derechos y libertades
3ºEl fair play
4ºEl grado de legitimación popular
5ºLa independencia de poderes
6ºLa transparencia del Gobierno
7ºLa vigencia de las leyes
8ºLos límites al Estado
9ºLa alternancia en el Poder

...

En base a estas cuestiones y otras muchas más no tan claves pero que desgraciadamente se me quedan en el tintero, la comparación del sistema político español y su Constitución respecto a la de otros países continentales, o incluso con América, me dice que existen enormes fallos estructurales y un gran vacío entre el espíritu de la Constitución y la aplicación real.

Y sí, puede que yo enjuicie severamente estas décadas de Democracia, pero al menos no invoco mi afán científico y objetivo para luego emitir opiniones claramente exegéticas y esta vez sí, sesgadas.

Saludos.

Republica Rojigualda dijo...

No está prohibido decidir qué postura parlamentaria desea mantaner un partido y transmitirle a sus diputados esta decisión, siendo éste el que, en última instancia, decida el sentido del voto.
No hablamos de lo que está prohibido o permitido. Hablamos de si UPD quiere cambiar el sistema o ser más de lo mismo. Y sí, claro, el diputado puede elegir en última instancia, pero sabe que votar en contra del partido puede ser el final de su carrera política.

Decir que el TC normalmente no ha parado al gobierno o al legislativo, es desconocer las miles de sentencias que otorgan amparo o declaran la inconstitucionalidad.
Sí, ha parado al gobierno, por ejemplo ha parado a los gobiernos de Aznar, porque el PP nunca, ni siquiera cuando tuvo mayoría absoluta, contó con las aplastantes mayorías de las que gozaba Mr. X. También ha parado a los de Mr. X, pero muy poquito, muy poquito, cosas testimoniales, básicamente para justificar los sueldos de esos 12 cargos políticos.

y no se podría hacer nada en ninguna parte del país, por necesario que fuese, sin compensar a los legisladores del resto del alguna forma.
¿Y me dices eso para defender la partitocracia actual? ¿Tú es que no sigues las noticias o crees que los indocumentados somos nosotros y nos la puedes dar con queso? Vamos a ver, si aquí lo único que hay es sobornos con el dinero de todos a diputados de partidos minoritarios nazi-onanistas para que aprueben los PGE, impidan la reprobación de una ministra o den su visto bueno a cualquier desmán del gobierno. ¿Pero de qué me hablas?

La disciplina de partido no es servilismo. La gente vota un partido y espera que los elegidos se comportan como dice el partido al que han votado.
Bueno, es posible que los educados al otro lado del telón de acero piensen así. Los verdaderos demócratas no. Un partido no es un bloque monolítico donde todos piensan lo mismo, en un partido confluyen distintas corrientes ideológicas muchas veces enfrentadas entre sí. Yo no voto a unas siglas o a un logotipo, yo voto a un grupo de personas porque creo que representan mejor mi pensamiento o intereses

El sistema de partidos da coherencia y es barato
¡Pero qué manía con que es más barato! Si lo que queremos es un sistema político barato, lo más barato que hay es una dictadura. Fuera parlamento, fuera elecciones periódicas, fuera partidos y sindicatos, fuera instituciones organizativas y tribunales varios… Cogemos a un señor, le damos poderes absolutos y así, no veas la de dinero que nos íbamos a ahorrar. Si tú estás dispuesto a sacrificar calidad democrática (idea que parece que te gusta bastante) a cambio de un menor gasto, entonces me parece que no tenemos más que hablar, porque estás en las antípodas de mi pensamiento.


Veo, geógrafo que eres un fervoroso defensor de la partitocracia. Eres el primero que encuentro y que además es consciente de ello. He tenido la oportunidad de hablar con varias personalidades implicadas en el levantamiento y consolidación del régimen del 78, y la verdad es que cuando les he preguntado sobre estos temas, siempre se ruborizaban y salían con excusas de mal pagador como “hay que entenderlo, eran otros tiempos, no se sabía lo que iba a pasar”, “había que buscar el consenso”, “se ha hecho un mal uso de la constitución”... Nunca he oído a nadie defender la partitocracia con tanto entusiasmo como tú, ni siquiera a los más directamente beneficiados de ella, lo cual es preocupante. Y aunque Mario y tú estéis encantados con esta partitocracia, superior, según vosotros a la democracia más perfecta del mundo, cuando este régimen exhale su último en unos años, aquí habrá una verdadera democracia, os guste o no.

Anónimo dijo...

De acuerdo con casi todo, excepto alguna cosa:

-Yo si creo que la partitocracia es mala. Deberiamos votar a personas, no a listas que luego se encierran en un despacho y pactan un gobierno con un partido que yo no quise votar. Si van a hacer eso, si van a prostituir mi voto de esa forma, entonces que convoquen segundas vueltas (pero en la democracia a la española eso no existe).

-También estoy en contra de que no exista libertad para votar. Es decir, si un diputado del PP cree que algo que presenta el PSOE es bueno para el país, pues, aunque esté a favor, deberá votar contra esa Ley por las disciplinas de partido. No tiene ninguna lógica defender un sistema en el que las élites de los partidos elijan, por pura propaganda, no hacer lo mejor para el país.

Saludos
PD: Si Estados Unidos fuera una democracia "de verdad", no tendría a 60 lobbyists ofreciendo dinero a los congresistas a cambio de votar en contra de ciertas leyes, como la sanidad pública o el control de armas (allí hacer esto es legal y muy "democrático").

Republica Rojigualda dijo...

Carabineru: Si EEUU no es una democracia de verdad, ¿qué país lo es?

Los Lobbys son inevitables, no conozco un país ajeno a ellos. La diferencia es que si en EEUU un congresista o senador vota en contra de lo que esperan sus electores, es muy posible que éstos dejen de votarle. Así que por muchos lobbys que presionen a los representantes, saben que de quien dependen es de los ciudadanos.

Aunque me gustaría que me demostraras que es legal sobornar a los representantes en EEUU...